Somos un gemido en espacios vacíos,
somos susurro en bienaventuradas palabras.
Somos palabras hablando de clavos y maderas…
. . .
Somos la idealización de una oración buena.
Oración que tarde o temprano
tendrá que reescribirse
porque hay sangre con bocas
que atormentan la tinta y el papel
de algún ignorante.
. . .
Somos la escribana prudencia olvidada.
Somos héroes trágicos de aquella novela
a la que Fuentes menosprecia
como enciclopedia empolvada.
. . .
Divino Borges, Fuentes y Rulfo,
gemido olvidado
con letras de trágica prudencia literaria.
. . .